El Síndrome de Fatiga Crónica o también llamada Enfermedad Sistémica de Intolerancia al Esfuerzo
Se trata de una enfermedad crónica, no reumatológica que se caracteriza principalmente por fatiga persistente y dificultades cognitivas sin una causa aparente de base. Epidemiológicamente esta patología afecta al 0,5% de la población mundial; siendo en su mayoría personas de 29 a 35 años. El 80% de los afectados son mujeres. Su carácter de enfermedad fue definido por la OMS en 1994.
Etiología
La etiología de esta enfermedad continúa siendo controvertida y se han planteado varias hipótesis. La primera hipótesis constituye un origen viral; sobre todo en una infección por el virus de Epstein Barr el cual permanece latente en el organismo de las personas afectadas y se reactiva cada cierto tiempo para causar la sintomatología antes descrita. Dentro de otras posibles explicaciones se ha postulado una desregulación del Sistema Inmune, la cual es culpable de todos los síntomas. Finalmente, actualmente se acepta como una de las hipótesis más aceptadas a una falla en el eje Hipotálamo-Hipófisis-suprarrenal, tal y como sucede en la fibromialgia.
Cuadro Clínico
El cuadro clínico, por su parte, no es homogéneo, pero se caracteriza por desencadenamiento de fatiga persistente y súbita tras una infección, fatiga exagerada sumada a alteraciones cognitivas y del sueño, síntomas exacerbados por el ejercicio y sobre todo por presentarse en el marco de un paciente sin previa historia de quejas somáticas como cefalea crónica tensional o lumbalgias crónicas. Adicionalmente, cabe decir que existen artralgias y mialgias, pero la fuerza y demás exámenes neuromusculares no están alterados y también que se presentan alteraciones como intolerancia a olores, taquicardias y síncopes recurrentes. Algo que la diferencia de la Fibromialgia es la presencia de febrículas, de odinofagia, fatiga tras ejercicios intensos y linfadenopatías dolorosas y palpables.
Tratamiento
Los resultados de este estudio publicado en el NCBI indican que suplementos de ginseng y la acupuntura tiene efectos anti-fatigas y pueden elevar células T, corregir subseries de células T y mejorar los niveles de IL-4, reducir la expresión de IFN-gamma y regular el equilibrio de la relación entre células Th 1/Th 2. Estos hallazgos sugieren que el mecanismo de acción en el Síndrome de Fatiga Crónica de estas terapias está relacionado con el equilibrio inmune alterado en este cuadro.
Además, los resultados de este ensayo clínico pragmático sugieren que la acupuntura añadido a cuidados habituales pueden mejorar los síntomas del Síndrome de Fatiga Crónica y de la Fatiga Crónica Idiopatica.
El Síndrome de Fatiga Crónica o también llamada Enfermedad Sistémica de Intolerancia al Esfuerzo
Se trata de una enfermedad crónica, no reumatológica que se caracteriza principalmente por fatiga persistente y dificultades cognitivas sin una causa aparente de base. Epidemiológicamente esta patología afecta al 0,5% de la población mundial; siendo en su mayoría personas de 29 a 35 años. El 80% de los afectados son mujeres. Su carácter de enfermedad fue definido por la OMS en 1994.
Etiología
La etiología de esta enfermedad continúa siendo controvertida y se han planteado varias hipótesis. La primera hipótesis constituye un origen viral; sobre todo en una infección por el virus de Epstein Barr el cual permanece latente en el organismo de las personas afectadas y se reactiva cada cierto tiempo para causar la sintomatología antes descrita. Dentro de otras posibles explicaciones se ha postulado una desregulación del Sistema Inmune, la cual es culpable de todos los síntomas. Finalmente, actualmente se acepta como una de las hipótesis más aceptadas a una falla en el eje Hipotálamo-Hipófisis-suprarrenal, tal y como sucede en la fibromialgia.
Cuadro Clínico
El cuadro clínico, por su parte, no es homogéneo, pero se caracteriza por desencadenamiento de fatiga persistente y súbita tras una infección, fatiga exagerada sumada a alteraciones cognitivas y del sueño, síntomas exacerbados por el ejercicio y sobre todo por presentarse en el marco de un paciente sin previa historia de quejas somáticas como cefalea crónica tensional o lumbalgias crónicas. Adicionalmente, cabe decir que existen artralgias y mialgias, pero la fuerza y demás exámenes neuromusculares no están alterados y también que se presentan alteraciones como intolerancia a olores, taquicardias y síncopes recurrentes. Algo que la diferencia de la Fibromialgia es la presencia de febrículas, de odinofagia, fatiga tras ejercicios intensos y linfadenopatías dolorosas y palpables.
Tratamiento
Los resultados de este estudio publicado en el NCBI indican que suplementos de ginseng y la acupuntura tiene efectos anti-fatigas y pueden elevar células T, corregir subseries de células T y mejorar los niveles de IL-4, reducir la expresión de IFN-gamma y regular el equilibrio de la relación entre células Th 1/Th 2. Estos hallazgos sugieren que el mecanismo de acción en el Síndrome de Fatiga Crónica de estas terapias está relacionado con el equilibrio inmune alterado en este cuadro.
Además, los resultados de este ensayo clínico pragmático sugieren que la acupuntura añadido a cuidados habituales pueden mejorar los síntomas del Síndrome de Fatiga Crónica y de la Fatiga Crónica Idiopatica.